En cuanto hace calor, ya estamos pensando en lo que plantaremos este año en el jardín. Primer paso importante: la mezcla de sustratos que tenemos que preparar para el primer crecimiento de las plantas. El problema es que puede ser muy costoso. Esto corre el riesgo de retrasar nuestro proyecto de plantación.

Afortunadamente, hay muchos objetos cotidianos que podemos reciclar para darles una segunda vida y una nueva utilidad.

Hoy nos centraremos en estos famosos bizcochos. Inevitablemente, con el tiempo, envejecen y se desgastan mucho. Esta no es una razón para pensar automáticamente en tirarlos. Dígase a sí mismo que incluso en este estado serán de gran valor para su jardín.

Al reciclar sus viejas esponjas en beneficio de sus plantas, ¡se sorprenderá de su potencial!

Esponja 3

1- Aligerar el soporte

Primero, necesitas desinfectar tus esponjas. Recógelas y colócalas en un recipiente con agua y unas gotas de lejía. Déjalas reposar unos minutos y luego déjalas secar. Esto eliminará cualquier residuo de comida u hongos que puedan afectar el suelo donde plantarás tus plantas.

Necesitará:

  • Unas esponjas desinfectadas
  • Tijeras
  • Alcohol
  • Frasco
  • suelo fertil
  • Perlita (arena de sílice de origen volcánico)

Uso:

  1. Primero desinfecte las tijeras con alcohol.
  2. Corta esponjas viejas y recicladas, previamente desinfectadas con lejía, en pedazos. Su porosidad será muy buena para que tu suelo drene bien.
  3. En un balde, mezcle la tierra con la perlita, luego agregue los trocitos de esponja. Esta mezcla se puede utilizar como base para cualquier planta de maceta que desee cultivar. Ya sea una planta de interior o de exterior.
  4. Mezclar bien para que la esponja absorba la tierra con todos los nutrientes.
  5. Tome la maceta en la que está trasplantando o sembrando. Llena 1/4 de la maceta con la mezcla, esta será la base de tu sustrato.
  6. Agregue la tierra fértil previamente separada hasta llenar la maceta, su maceta tendrá una esponja en el fondo del compost y la parte superior de la tierra fértil se aclarará.
  7. Trasplanta tu planta favorita, verás que aumentará su crecimiento al tener un  sustrato  bien preparado . La esponja retendrá el exceso de humedad, en caso de que el riego sea intenso.
  8. La esponja ayudará a retener el agua necesaria y evitará que la tierra se seque. Esta cualidad es muy útil al principio, cuando la planta necesita agua o cuando estás en movimiento y no puedes regar.

Otra ventaja de la esponja: al abonar, va soltando poco a poco el  abono  , lo que nos ahorra tener que abonar a menudo.

2- Brote de semillas

Descubre otra buena solución para hacer germinar tus semillas sin necesidad de tierra.

Semilla

Necesitará:

  • Unas esponjas desinfectadas
  • Tijeras
  • Alcohol
  • Semillas
  • Botella de agua

Uso:

  1. Desinfectar las tijeras con alcohol. Este paso es fundamental porque pueden quedar rastros de otros esquejes de plantas y contaminar tu esponja con hongos o bacterias.
  2. Corta las esponjas en línea recta en el centro, a lo largo, a lo largo de tu esponja.
  3. Debe tener aproximadamente 1 cm de profundidad.
  4. Inserta tus semillas.
  5. Humedecer con agua para estimular la germinación. La  semilla  necesita calor y humedad para germinar. Si le ofreces este ambiente, germinará sin problema en tu germinador.
  6. En unas semanas notarás el inicio del crecimiento en tu planta.

Eso es todo, ahora que has descubierto este nuevo uso, muy útil y económico, ¡verás tus esponjas para platos bajo una luz diferente!